El
mes pasado estuvimos analizando la primera parte (exposición) de
la obertura de Los maestros cantores de Nuremberg. Habíamos
llegado hasta el compás 88, momento en que queda una cadencia sobre
un Sol mayor con séptima y novena. Dicha cadencia se resuelve, como
corresponde, en Do mayor. En esta tonalidad aparece el Motivo
de la pasión amorosa:
Mientras
suena este motivo, los violines segundos tocan una figura melódica
que vale la pena destacar, pues aparecerá más adelante, en la reexposición
(y, por ejemplo, también subraya las palabras "wie kann die
Kunst" durante la arenga final de de Sachs).
El
motivo de la pasión amorosa se repite, pero esta vez modulando de
Do menor a Mi bemol mayor; luego una tercera vez, de Mi bemol mayor
a Sol bemol mayor. Entonces la tonalidad cambia a Mi mayor y se
introduce el Tema de amor, que también volverá a aparecer
más adelante (es el tema que canta Walther en su canción del premio,
cuando dice las palabras: "Huldreichster Tag"):
Tras
este tema, se escucha un breve motivo que también aparece en la
canción del premio:
Y a
continuación suena el Motivo de la necesidad del amor (que
acompaña a Walther cuando este diga, en su canción de primavera,
el verso "nun laut und hell") en los violines primeros:
Este
motivo se repite una vez más en las maderas. Y todavía se escucha
una tercera vez, pero con un cierto desarrollo ascendente.
Estas
tres apariciones de dicho motivo forman una frase que también oiremos
en la canción de la primavera de Walther (desde el verso "nun
laut und hell"). Justo al final de esta frase, los chelos inician
tímidamente el Tema de amor, pero son interrumpidos por los violines
primeros, que interpretan la tercera repetición (la que incluye
el desarrollo ascendente) del Motivo
de la necesidad del amor, pero en
otra tonalidad. A continuación, se repite el último
compás de esta frase.
A
partir de aquí, los violines, las flautas y los oboes van repitiendo
las últimas cinco notas que acabamos de escuchar:
Mientras
tanto, los chelos y el clarinete segundo interpretan una breve variación
del Tema
de amor.
Por
fin, los violines repiten varias veces el Motivo
de la necesidad del amor, para modular a Mi bemol
mayor. Con este cambio de tonalidad, en el compás 122, se introduce
el elemento más cómico en lo argumental, y en lo formal, estamos
ya en el centro del desarrollo de la forma sonata.
Esta
comicidad se logra interpretando el Tema
de los maestros cantores, pero disminuyendo el valor
de las notas, de forma que suena mucho más rápido y picado.
Este
tema, al principio de la obertura, dura siete compases. Aquí el
valor de las notas es la mitad y por eso dura sólo tres compases
y medio. Inmediatamente, los violines ejecutan una
variación del Motivo
de la necesidad del amor , y la repiten varias veces
de forma ascendente, también mucho más rápido que el motivo original.
Enseguida
sigue el
resto del tema de los maestros cantores (equivale
al fragmento que va desde el compás 14 al 26, del principio de la
obertura), pero con las mismas características de rapidez y staccato.
Y al igual que antes, le sucede la variación del Motivo de la necesidad
del amor.
A continuación,
comienza un episodio en el que se combinan dos líneas melódicas.
Las flautas, los oboes y los clarinetes tocan una variación acelerada
del Tema
del arte de los maestros cantores:
A la
vez, se escucha en los chelos un motivo de carácter burlón:
cuyo
ritmo convendrá memorizar, pues en muchos pasajes posteriores aparecerá
esta estructura de cuatro semicorcheas y dos corcheas. Con este
motivo se construye el contrapunto en los chelos a la melodía de
las flautas, oboes y clarinetes.
En
los dos compases siguientes, se repite lo mismo, pero en la dominante
(Si bemol mayor) y con la siguiente disposición: la melodía en las
flautas y el primer oboe, y el contrapunto en las violas y los chelos.
Se expone una vez más, en la tónica (Mi bemol mayor), la melodía
en la primera trompa y el primer fagot, mientras el contrapunto
suena en las violas y los violines segundos. Y por último, otra
vez en la dominante, la melodía en los chelos y el segundo fagot,
y el contrapunto en la segunda flauta, el primero oboe y en los
clarinetes.
Se
inicia ahora un episodio modulante, basado en el motivo con carácter
burlón:
Como
se ve, en los violines segundos se inverte el ritmo del motivo,
es decir, primero van las dos corcheas y después las cuatro semicorcheas,
mientras que en la segunda flauta, el primer oboe y el primer clarinete
el motivo sigue su ritmo normal.
En
el compás 151 se produce un cambio de armadura, pues se vuelve a
la tonalidad de Do mayor. Sin embargo, la música mantiene un poco
de tensión, pues durante siete compases, todo lo que suena va a
girar alrededor de la dominante (Sol mayor con séptima y novena).
A lo largo de estos siete compases, vamos a poder escuchar el Motivo
de los maestros cantores en los trombones, mientras
en el flautín, la primera flauta, el segundo oboe, y el segundo
clarinete suena el mencionado motivo
de carácter burlón, aunque sólo la primera parte,
la de las semicorcheas.
A esto,
los violines le añaden una melodía
por grados conjuntos (por tonos y semitonos).
Así
hemos llegado al final del compás 157, al final del desarrollo de
esta obertura y también al final del capítulo de este mes. Dentro
de 30 días, explicaremos la parte más compleja y rica en leitmotivs
y contrapunto: la reexposición.
Bibliografía:
- Richard
Wagner. Das Buch der Motive. Band I, Ed. Schott, Mainz, 1920
-
Richard Wagner, Die Meistersinger von Nürnberg, Dover, Nueva
York, 1976.
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