Las retransmisiones operísticas en salas de cine, ya sean en directo o en diferido, se están convirtiendo en una de las formas favoritas para disfrutar de la música.
Las ventajas para los aficionados son dobles. Por un lado, es posible asistir al estreno de producciones en cualquier lugar del mundo, donde encontramos al MET de Nueva York como el pionero en este tipo de retransmisiones. Y, por otro, permite ver las óperas en unas condiciones de imagen y sonido difícilmente alcanzables en casa.
Precisamente en este último aspecto se dio un salto cualitativo el pasado 21 de abril, cuando tuvo lugar por primera vez en España una retransmisión de una ópera en 4K (Ulta alta definición). Este nuevo formato permite ver una resolución de imagen de 4.000 píxeles, cuatro veces más que la Alta Definición habitual de los televisores domésticos actuales.
Pionera en tantas ocasiones, la música de Wagner fue la elegida para esta retransmisión. En concreto, la última producción de Parsifal, en el Teatro Real, con dirección de Semyon Bychkov, fue la que se proyectó en directo en los cines Kinépolis de Madrid
Esta retrasmisión forma parte de una iniciativa del Teatro Real, RTVE e Hispasat para llevar óperas en 4K a los cines de todo el mundo, como ya ha hecho de forma pionera la Ópera de Viena, con seis títulos en UHD la pasada temporada. Nabucco, con Plácido Domingo en mayo de 2014, fue la primera ópera 4K retransmitida desde la capital austriaca.
mayo 2016 |