El pasado mes de febrero se dieron a conocer las temporadas 07-08 de dos de los teatros de ópera más importantes del país, el Gran Teatro de Liceu de Barcelona y la Ópera de Oviedo. En ambas programaciones destaca la presencia de la música wagneriana.
El Liceu de Barcelona, que abrirá su nueva temporada con Andrea Chénier de Giordano, contará con dos títulos wagnerianos en su cartel previsto, ambos ya en 2008. Entre marzo y abril subirá a escena Tannhäuser en 13 representaciones (19, 25, 27, 29 y 31 de marzo y 3, 6, 8, 10, 12, 14, 18 y 22 de abril). Por su parte, Plácido Domingo volverá a ser Siegmund en Die Walküre que se representará en dos únicos días (28 y 31) en mayo de 2008, en una versión en concierto. Por último, la música de Wagner, junto a la de Bach, estará también presente en forma de danza en una producción del Ballet de Hamburgo, que podrá verse en la primavera del año que viene y que estará íntimamente relacionada con el estreno en España de Muerte en Venecia, la ópera escrita por Benjamin Britten y basada en la obra de Thomas Mann.
Por otro lado, la temporada de la Ópera de Oviedo será oficialmente presentada el próximo mes de marzo, pero sus títulos ya se han dado a conocer. Para celebrar el sesenta aniversario de la temporada ovetense, nada mejor que comenzarlo con Tristan e Isolda el próximo 15 de septiembre. Contará con un elenco de cantantes wagnerianos de primera fila, encabezado por Jane Eaglen como Isolde, Jon Frederic West como Tristan y Lioba Braun, como Brangäne. La producción, que aún está por concretar desde el punto de vista escénico, será dirigida musicalmente por Maximiano Valdés, director titular de la Orquesta Sinfónica del Principado de Asturias, que dirige desde 1994.
Febrero 2007 |