El popular Concierto de Año Nuevo, que cada 1 de enero se celebra en el Musikverein de Viena, ha homenajeado este año a Richard Wagner y Giuseppe Verdi por el segundo centenario del nacimiento de ambos. Así, la música ligera de la familia Strauss ha convivido en la presente edición con la de dos de los más grandes compositores de ópera de la Historia.

La obra de Wagner elegida para acompañar la gala straussiana ha sido el preludio al tercer acto de Lohengrin, una de sus piezas más populares y que en ocasiones suele interpretarse de forma independiente a la ópera. Su brillante y vibrante carácter ha sido la razón elegida por la Filarmónica de Viena para ser interpretada en el concierto en perfecta sintonía con la música vienesa del resto del concierto.

Aunque bastante alejado de su principios artísticos, Wagner no fue ajeno a lo largo de su vida a la enorme popularidad que en Viena gozó la música de los Strauss durante buena parte del siglo XIX. En 1832, sin haber cumplido los 20, Wagner asistió en Viena a varios conciertos donde se representó con gran entusiasmo del público la música de Johann Strauss padre.

Además, en 1875, Wagner realizó unas indicaciones de orquestación sobre un vals de Johann Strauss hijo, en concreto el popular “Vino, mujeres y canciones”, que está numerado en el catálogo de obras de Wagner como WWV 109.

enero 2013