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Número 276 - Zaragoza - Diciembre 2023|
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FORO
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| Próximamente en el Liceo |
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Hola a todos: Os trancribo lo que dice el crítico de la revista Scherzo (señor don Eduardo B. Bentolila) sobre el Don Giovanni que tendréis que soportar, digooooo, que podréis ver en el Liceo. Ya sé que no es un tema wagneriano, pero bueno, a todos nos gusta la música, y a Wagner le encantaba "Don Giovanni", ¿no? ;-) La puesta en escena es de nuestro bienamado Calixto Bieito. "Al concluir la ópera, uno por uno los personajes apuñalan al drogado e impotente Don Giovanni atado en una silla de espaldas al público. El cadáver ensangrentado del Commendatore se ve doblado al borde del maletero de su auto; ¿pero cuándo lo mató Don Giovanni?; ¿al comienzo de la ópera o al final? ¿Y qué es lo que sucede en medio? ¿Una visión? Calixto Bieito desarrolla un psicodrama que comienza con una mentira, Donna Anna se entrega a Don Giovanni y le miente a Don Ottavio, quien le hace el amor mientras canta "Non mi dir". Las emociones son inmensas, las soluciones de Bieito ingeniosas, hasta grotescas y hacen sentir incómodo al espectador. [...] Nunca más se preguntará el lector quién es Don Ottavio, porque después de verlo vestido de Superman, el personaje sale a relucir desde el ridículo. ¿Y no es lo que se le pide a ese hombre digno de Superman? [...] Y hay muchísimo más, porque éste es un Mozart moderno, vital, muy de hoy, que se desarrolla en la Villa Olímpica de Barcelona, pero el lugar no importa, porque los personajes son universales. Es una visión nihilista, pero también pesimista, que deja un sabor muy amargo. [...] Hubo abundantes abucheos, señal de que usted está cabalgando a buen destino, señor Bieito. Esta producción será vista en el Liceu próximamente. Que dará que hablar, no cabe duda." Ah, por cierto, la noticia se complementa con una foto del montaje: en ella se ve a un Don Giovanni ¡¡VESTIDO CON UN CHANDAL DEL BARÇA!! Sí, sí, os lo juro: con un chandal blaugrana y con el escudo del F.C. Barcelona. Y es que las puestas en escena de este tipo de personas, como el señor Bieito, sólo dan que hablar; nunca hacen pensar. Porque claro, si haces pensar, eres un pelma; en cambio, si haces hablar, conseguirás un artículo gordo en la sección de "Cultura". Qué pena. Un saludo, Germán |
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Saludos. ¡Horror! Calixto Bieito otra vez en el Liceu. ¡Estamos apañados! Después del "Ballo" del año pasado, ahora se atreve a destrozar una de las mayores óperas de todos los tiempos como es "Don Giovanni". Una duda: ¿lo que cuenta el tipo ese que responde al nombre de Eduardo B. Bentolila es broma? Quiero decir: ¿ha pretendido ser sarcástico? ¿O es así de imbécil? Y respecto al señor Bieito, espero que algún día alguien -más- se de cuenta de lo basura que es y se pase la moda. ¿"Don Giovanni" vestido con un chandal del Barça? ¿Y el Comendador es del Madrid o algo así? Lamentable. Atentamente, Der Niblungen Herr |
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¿Como pueden decir que esa producción es muy de hoy? ¡Está totalmente pasada de onda!¡Don Giovanni no puede llevar en la actualidad un chandal del Barça!. Propongo que cambien el nombre a la ópera y la llamen "Don Geovanni". Así sí que será una producción actual para los tiempos que corren. ;-). Ahora en serio. Hay que joderse (con perdón). Uno nunca deja de asombrarse de hasta donde llega la estupidez humana. ¿Cuando se dejarán de hacer bodrios a partir de las grandes obras de nuestros pobres clásicos? Saludos. |
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En fin. Como dice Germán, la cuestión es que hablen de tí en las páginas de cultura, así tendrás contratos más jugosos. Cosas de la mercadotecnia. El problema no es, desde mi punto de vista, que se haga una disgresión sobre el original. Esto puede ser loable siempre que los resultados conduzcan a lo deseado por el autor. Por poner un ejemplo, Picasso conmocionó a todo el mundo con sus Meninas, sin embargo, consiguió demostrar que se podía expresar exactamente lo mismo que lo conseguido por Velazquez con técnicas totalmente diferentes y ofreciendo una visión muy de su tiempo y disgregada de la original. Pero claro, Picasso era un genio y mucho me temo que el sr. Bieito está un poco lejos aunque, como siempre, uno es genio en función de cuantos voceras con influencia en los medios te eleven a dicha categoría. Un saludo a todos y felices vacaciones -a mi me quedan horas para marcharme-. Ignacio. |
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Una pregunta... Cuando algún tipo de estos (como el Bieito del que aqui se habla) se raya tanto con la representación de una obra, ¿modifica también parte del texto del libreto para que se adapte a la escenografía o el texto permanece inamovible aunque lo que se vea no tenga nada que ver? Quizá sea demasiado ingenua e inocente, pero es que nunca he visto/oido una ópera cuando es "prostituída" (que no quiere decir que no haya tenido ocasión, simplemente cuando he visto "algo" asi he cambiado de canal) y no se a "qué" sonará... Gracias! Juan Vte. |
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Pues no, el texto no se toca. POr ejemplo, yo vi una representación de Carmen, con escenografía de Bieito: un mástil y una cabina telefónica. Parece ser que se pretendía simbolizar un pene y una vagina respectivamente. Fuera lo que fuera, la cuestión era que pq Micaela se hace toda la caminata desde Navarra para llevar a D. José el mensaje de su madre, cuando ésta misma podía haberle localizado por teléfono. Tb recuerdo la última Boheme del Real, en la que no sé quien era el escenógrafo, pero ponía a Rodolfo escribiendo sus poemas a máquina. Me imagino que en el cuarto acto siguió diciendo aquello de "Che penna infame!", lo que no creo es que arrojase la máquina de escribir en su lugar. La acción se ambientaba a principios de este siglo, y el tratamiento escénico podía resultar agradable, a pesar de todo. Sin embargo, lo peor de aquella producción era que el director de escena se mutiló toda la energía y entusiasmo de unos jovenes artistas y filósofos, que se pasaban la mayor parte del tiempo del primer acto tirados por el suelo, como espíritus derrotados. Tb destrozaron la magia que envuelve el encuentro de Mimí y Rodolfo, haciendo que ellos mismos soplasen sus velas, cuando no es eso lo que dice el libreto. Y la banda militar que desfila al final del segundo acto, parecía una banda de "majoretes". En fin, que hay muchas maneras de destrozar una obra. Saludos. Javier |